Hay varias fuentes naturales de isoflavonas pero la más importante son las soyas y el trébol rojo.

Trébol rojo

El trébol rojo es una planta perenne con trifoliado se va y color de rosa a las flores rojas. La planta deriva su nombre en parte de sus flores, que son fragantes y pueden extenderse en color de blanco a un rojo oscuro. El trébol rojo es un miembro de la familia de la legumbre y ha sido utilizado por todo el mundo como fuente del heno para los ganados, los caballos y las ovejas y por los seres humanos pues una fuente de la proteína en se va y los brotes jóvenes.
Los estudios modernos demuestran que el trébol rojo contiene grandes cantidades de compuestos de isoflavona, como la genisteina, que tienen propiedades tipo estrogénicas leves. El efecto beneficioso de los isoflavonas del trébol rojo es muy similar a ése encontrado con los isoflavonas de la soja. Los isoflavonas del trébol rojo reducirán síntomas de la menopausia. Los isoflavonas del trébol rojo ayudan a mantener la densidad de los huesos en mujeres menopausal y de la peri-menopausia. Los isoflavonas del trébol rojo no han demostrado un colesterol que reducía efecto, probablemente porque las proteínas de soja toman un papel importante del colesterol que reduce efecto.

Soja

La soya es una leguminosa originario de China pero que se está cultivando en grandes proporciones actualmente en América. La cantidad de proteínas que contiene esta leguminosa oscila entre un 30 % y 45 %. La soya contiene casi el doble de proteínas que la carne y de la misma excelencia. La grasa del poroto también es de muy buena calidad, pues entran en su constitución, ácidos grasos no saturados, esenciales en una alimentación equilibrada. La soya contiene isoflavonas (genisteína, daidzeína, gliceteína), sustancias químicas que desde hace algunos años son objeto de especial atención y estudio. Las isoflavonas están presentes en cantidades relativamente grandes en virtualmente todos los productos de soya.

Suplementos de isoflavonas

Hay muchos de suplementos de isoflavonas en el mercado. La mayoría de estos suplementos contienen los isoflavonas que se extraen de habas de la soja o del trébol rojo. Pueden ser considerados como productos naturales.
La ipriflavona es un derivado sintético de las isoflavonas para las que estudios experimentales en animales y en humanos había sugerido una actividad osteoblástica. La ipriflavona está disponible como suplemento nutricional.